Habilitación cementerio Sefaradí Español. Donación de parcela en el Cementerio San Vicente
En 1926 el Centro Unión Israelita recibió en donación una parcela para ser utilizada como cementerio propio en San Vicente. Los restos de quienes se hallaban en el cementerio oficial fueron trasladados al cementerio nuevo.Cuentan algunos memoriosos que ese traslado no fue sencillo de realizar, no sólo por el proceso en sí, sino también porque había un control por parte de la Municipalidad de Córdoba que no permitía más de una cierta cantidad convenida con anticipación. El problema era que en el pensamiento de los dirigentes de aquella época la consigna era: “Tienen que ir todos, no puede quedar nadie afuera”. Y para cumplir con este mandato fue necesario recurrir a formas alternativas, como realizar algunos traslados al amparo de la noche[1]. Tiempos heroicos de la comunidad que actuaba motivada por el objetivo de sepultar a sus muertos de acuerdo al rito judío.Salomón Misonischnik recordaba que cuando se adquirió la nueva sección del camposanto fue necesario dar algunos rodeos, debido a que la Municipalidad de Córdoba no permitía la compra de terrenos para ser utilizados como cementerios y menos aún otorgaba la habilitación para tal fin. Junto con Raúl Griboff se encargaron de la compra de la propiedad, que estaba destinada formalmente para otro fin, para ser usada como cancha de fútbol.